Edulcorado del sucedáneo de cacao. La armonía era plena, la brisa enmudecía los pensamientos de A, B y C ...
... A pensaba en Que, B pensaba en Que y C pensaba en Que... pero Que no se manifestaba.
La elocuencia iluminadora del sol regresó la esperanza y la triada seguía pensando en Que.
El suspiro de los tres elevó en rectitud el vapor, construyendo un sueño. A pensó que la vida es sueño, como Calderón; B voló al lado de Peter Pan y C creyó ser el amante fugáz de La Última Niebla.
Aquella legibilidad posible en la fuente de insomnio destruyó la continuidad, el sueño se discipó y la sed apareció, también apareció el fondo de la taza y la sequedad entregada por la sorpresa de ver a Que hinchado, en el fondo de la cafeína.
. - . - . -
Colectiva:
Prof. Mabel Álvarez
Prof. Marcela Muñoz
Prof. Dámaso Rabanal
domingo, 16 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Me encanta,cada vez que lo he leído me ha producido sensaciones distintas... y lógicamente, deseos de constituirme en D...
ResponderEliminarYA TENDREMOS LA OPORTUNIDAD DE UNA COLECTIVA DONDE ESTÉ D INVOLUCRADA . . .
ResponderEliminarOS AMOS .-